33 As The Lights Go Down

N/A: Hola, Hola! Feliz inicio de semana! Aquí vengo con un nuevo capítulo de esta historia, estamos bastante cerca del final.

«As the lights go down» Temporada I

Capítulo 33

Bill se encontraba sentado al borde del escenario mirando como parte de su equipo iba de aquí allá, arreglando los últimos detalles de la presentación de la banda. Había terminado de realizar la prueba de sonido y todo había salido bien, solo tenía un pequeño problema, el resto de la banda no estaba.

Había recibido una llamada de Tom el día anterior, el vuelo se había retrasado y no saldría hasta la mañana del día siguiente, eso hizo que Bill se pusiera aún más nervioso de lo que ya estaba, se sentía al borde de un colapso.

Necesitaba a Tom, necesitaba escucharle decir que todo estaría bien, necesitaba llorar en sus brazos, necesitaba que lo consolara. Había soñado tantas veces con ser cantante, pero nunca imaginó lo estresante que podía llegar a ser, tenía miedo y no sabía cuánto más iba a soportar sin salir corriendo dejando todo atrás.

Cuando el equipo terminó su trabajo, volvieron al backstage, allí el pelinegro se encerró en su camerino y se sentó frente al espejo. Pudo apreciar su deplorable aspecto y su rostro lleno de angustia y temor. Pronto vio como en sus ojos se empezaban a acumular lágrimas y dejó que estas corrieran libremente por sus mejillas, había retenido su llanto por los últimos dos días y ya no podía más, así que rompió a llorar desconsoladamente, deseando volver a su pequeño pueblo y encerrarse en su habitación, lejos de todo el mundo. Se sentía fuera de lugar.

De pronto, a través del espejo, pudo ver que la puerta se abría un poco y se escuchó esa escandalosa voz que reconocería en cualquier parte del mundo, unos segundos después pudo observar al dueño de la misma, su dueño… su Tom.

El mayor se quedó de pie en la puerta mirándole, regalándole una de esas sonrisas que tanto amaba y le derretían, luego entró por completo al lugar y cerró la puerta para tener la privacidad necesaria, después de tanto tiempo sin su gemelo.

– ¡Hola, gatito! – sonrió Tom

Inmediatamente, el pelinegro se levantó de la silla y corrió hasta los brazos de su hermano, los cuales ya le esperaban abiertos de par en par. En menor escondió el rostro en el cuello del mayor mientras este le abrazaba fuertemente, susurrando contra su frente que ya había acabado la larga espera, que él ya estaba allí.

– ¿Qué haces aquí? – preguntó el moreno – Se supone que llegarías al hotel

– Logramos llegar antes y decidimos venir aquí para ensayar, aunque fuera una sola vez todos juntos – dijo Tom acariciándole el cabello

El pelinegro se abrazó más fuerte a su gemelo y no pudo evitar comenzar a sollozar contra su cuello, preocupándolo. Este lo separó de él inmediatamente, viendo los ojos rojos y llorosos de su pequeño.

– ¿Por qué lloras, no te alegra verme? – preguntó el mayor dulcemente, tomando el rostro del menor entre sus manos

– No es eso – contestó el moreno limpiando una lágrima de su mejilla – Solo… no me siento bien – sollozó – Tengo miedo, Tom… no quiero echar a perder esto, no quiero que hablen mal de mí, que me traten como un usurpador

– ¡Hey, escúchame! – le mandó el guitarrista firmemente – No echarás a perder nada ¿entendido? Escuchaste lo que dijeron en la discográfica ¿no? Los fans quedaron muy satisfechos cuando te vieron en Automatic, no tienes de qué preocuparte, eres increíble, mi amor, por favor, no más lágrimas, todo estará bien – le consoló

– Pero… –

– Ni un pero – le cortó el mayor – Es normal que te sientas nervioso, es tu primera vez… en el escenario – intentó bromear, logrando que Bill se riera un poco también – Llora si quieres, desahógate, ya estoy aquí para consolarte – dijo abrazándole nuevamente

El moreno pasó sus brazos por la cintura del mayor y se echó a llorar en su hombro, dejando que todo el estrés que había acumulado durante esos días, abandonara su cuerpo.

&

Al ser las 6:30pm, los G’s y Tom esperaban en el estacionamiento subterráneo del hotel, conversaban animadamente, deseándose buena suerte y recordando una que otra anécdota de la banda. Estaban emocionados por tocar de nuevo en vivo luego de tanto tiempo en paro y aunque habían ensayado solo una vez todos juntos no estaban preocupados, ya lo habían hecho muchas veces así, cuando John no lograba llegar a los ensayos por alguna resaca de la noche anterior, así que aprendieron a confiar en sus habilidades y sabían que Bill también lo haría muy bien.

A los pocos minutos, Bill apareció en el estacionamiento, dejando al guitarrista deslumbrado por su aspecto. Luego de que Tom dejara de imaginar mil y un maneras de cómo le quitaría a su hermano la ropa que llevaba una vez que estuvieran solos, los cuatro chicos subieron al elegante Mercedes Benz negro que los llevaría hasta el lugar de la premiación.

Durante el camino, los tres antiguos miembros seguían riendo y conversando mientras Bill iba en silencio, con la cabeza agachada, admirando la perfecta manicura de sus uñas, pensando en qué pasaría apenas pusiera un pie sobre la alfombra roja que los estaba esperando. Tal vez los fans gritarían por él, David y Liz dijeron que el vídeo de Automatic había tenido muy buena recepción por parte de los fanáticos y que casi no habían comentarios negativos sobre el nuevo cantante, todo lo contrario. Pero, aun así no podía tranquilizarse ¿qué tal si lo odiaban por querer tomar el puesto de John? No sabía cómo reaccionaría si la gente llegara a gritarle groserías.

Salió de sus pensamientos cuando escuchó un griterío que se hacía cada vez más fuerte conforme avanzaba el auto. Después de que el auto girara por última vez, pudo ver todo el alboroto a través de los vidrios tintados. Personas gritando histéricamente intentando llamar la atención de su artista favorito, famosos luciendo caras ropas de diseñador, presentadores de T.V., camarógrafos y fotógrafos intentando conseguir la que sería la imagen en primera plana el día siguiente.

– Bien – sonrió Georg emocionado – ¡Aquí vamos!

El chófer del auto les abrió la puerta, Gustav fue el primero en salir, el pelinegro pudo escuchar como los gritos se hicieron más fuertes cuando el rubio comenzó a saludar a los fans. Después del baterista siguió Georg que provocó los mismo que su compañero, cuando Tom estaba a punto de salir del auto Bill le tomó del brazo, casi clavándole las uñas. El mayor le miró y pudo apreciar la cara de pánico de su gemelo.

– Todo va a estar bien – sonrió Tom dulcemente tomándole la mano – ¡Te amo!

El moreno apretó suavemente su mano y le regaló una débil sonrisa – ¡Yo también te amo! – susurró

El mayor le acarició una mejilla y luego de lanzarle un beso, salió del auto provocando un ensordecedor ruido en la alfombra roja. El nombre de Tom se dejaba escuchar en alaridos y el resplandor de los flashes había aumentado.

El pelinegro tragó grueso y después de dar un largo suspiro, también salió del auto y no pudo ver nada. La luz de los flashes le cegó y el ruido le aturdió, se sintió perdido hasta que una mano le tomó con fuerza del codo. Supo de inmediato que era Tom.

Cuando sus ojos se acostumbraron a la luz, pudo ver a muchas personas desesperadas y emocionadas gritando sus nombres, con celulares en mano tomando fotos y vídeos, con carteles y demás, como tantas veces había visto en T.V. Se sorprendió al escuchar que había personas que gritaban su nombre, igual había carteles con imágenes suyas que se habían filtrado en internet. Observó con más atención y era un grupo bastante grande de fanáticos, la mayoría chicas, que le sonreían y saludaban efusivamente. Confundido, decidió devolver las sonrisas y saludos con tímidos ademanes haciendo que los chicos enloquecieran.

Eso se sintió bien, le hizo sentir más confiado y seguro. Siguieron avanzando por la alfombra saludando a todos y posando para las fotografías en los lugares donde les indicaban los fotógrafos. Todo iba bien, pero la magia del momento se vio opacada cuando pasaron frente al grupo de fans de Too Late Marlene, ellos comenzaron a gritar groserías y a levantar pancartas con ofensas, pero para sorpresa del pelinegro no eran para él, eran para Tom. Sucio y traidor fue lo más decente que le gritaron.

El moreno miró a su hermano y vio que este miraba y escuchaba lo que le decían, pero no perdió la sonrisa de su rostro.

Cuando estuvieron dentro del arena, caminaron hasta llegar a sus asientos mientras saludaban a los famosos que les detenían para hablar con ellos. El pelinegro estaba fascinado por la cantidad de celebridades que había allí y más aún, por la familiaridad con la que hablaban con sus compañeros. Luego de unos minutos, se encontraban cómodamente sentados en sus respectivos asientos, en segunda fila.

– ¿Estás bien? – preguntó Bill al notar que su hermano estaba muy callado

– Sí ¿por qué preguntas? – respondió con un poco de brusquedad

– Creí que… esas personas… –

– Ya estoy acostumbrado – dijo con una débil sonrisa

&

Al cabo de una hora y treinta, los chicos disfrutaban de una amena ceremonia. Habían estado en mejores, pero el moreno estaba fascinado con las presentaciones de los artistas, nunca en su vida pensó que conocería a tantas estrellas de la música en una sola noche y no podía evitar emocionarse mientras apretaba el brazo de Tom y le explicaba quién era cada uno como si él no los conociera a todos desde mucho antes que él.

La presentadora volvió a aparecer en el escenario y gran parte del público se puso eufórico al saber que seguía.

– Creo que muchos de nosotros hemos estado esperando por este momento desde hace mucho tiempo y ahora, al fin los tenemos aquí – decía la mujer con emoción sobreactuada – Desde Londres, para todos ustedes, con su nuevo éxito, John, Jessie, James y Jaden ¡Por favor, reciban con un gran aplauso a Too Late Marlene! – gritó la mujer

El público enloqueció y gran parte de los famosos también se pusieron de pie. La música comenzó a sonar y en la enorme pantalla detrás del escenario, pasaban imágenes del vídeo musical de Lips Like Morphine, el nuevo single de la banda. Luego de unos segundos, todo se quedó en negro. Las luces del escenario se encendieron y dejaron ver a los cuatro chicos sobre el escenario, todos ataviados con ropas punk.

Con la señal del baterista comenzaron a tocar su nueva canción mientras el vídeo de la misma se reproducía en la pantalla, haciendo que a Tom se le crisparan los nervios. Sabía que la banda había estrenado un nuevo vídeo, pero no se había tomado la molestia de verlo hasta ahora.

Una chica de cabello negro y largo, de piel muy pálida y maquillada con sombra negra era la protagonista junto a los cuatro miembros de la banda. El argumento del vídeo era que la chica seducía y enamoraba a cada uno de los chicos hasta llevárselos a la cama, luego les dejaba haciendo que estos enloquecieran y casi hasta se mataran.

No hacía falta que le explicaran, la referencia estaba muy clara para Tom. El vídeo mostraba la vida de John y la suya, pero lo que más le molestaba era el parecido de la chica con Bill, le habían puesto hasta un lunar debajo del labio como el suyo. Sabía que su ex novia compartía un enorme parecido con su gemelo, pero era obvio que John había querido fastidiarlo utilizando la imagen de su hermano.

Desvió la mirada de la pantalla y miró a su antiguo amigo, quien cantaba sin dejar de mirarle con una sonrisa burlona en sus labios. No fue consciente de que apretaba fuertemente la rodilla de su gemelo, hasta que este se quejó desconcertado. Él no se había dado cuenta del parecido de la chica, él solo veía a la antigua novia de Tom cogiendo con los otros chicos y llegó a molestarse por la reacción de su gemelo, pensando que este sentía celos.

La presentación terminó y el público gritó fuertemente, la banda abandonó el escenario y de nuevo la presentadora apareció.

– ¿Tom? – le llamó Bill al verlo tan molesto

– Es hora de ir a prepararnos – dijo el guitarrista poniéndose de pie

El pelinegro le siguió al igual que los G’s, quienes también estaban un poco enojados. Una vez que se reunieron con su equipo, el menor se llevó a Tom a su camerino.

– ¿Qué sucede? – preguntó el moreno a Tom, quien le daba la espalda

– Nada – susurró Tom volteando

– Estás molesto por él – dijo el menor

– Ven acá – le ordenó el mayor ignorándolo

El pelinegro sonrió débilmente y obedeció dejando que su hermano le envolviera entre sus brazos mientras el ocultaba su rostro en su cuello.

– No dejes que te afecte – dijo Bill tiernamente – No quiero que estés molesto

– Es imposible estar molesto teniéndote entre mis brazos – dijo el mayor

Bill sonrió tímidamente y dejó que su gemelo le acurrucara contra su pecho por un rato más. Su molestia anterior quedó en el olvido en ese momento, había extrañado estar así y lo necesitaba. Su cuerpo no dejaba de temblar por los nervios.

La reacción que tuvo el público ante Too Late Marlene había sido asombrosa. La gente gritaba y cantaba al ritmo de ellos. Se habían adueñado del lugar y ahora sabía que, comparado con John, él no era nada, solo un simple chico pueblerino con grandes ganas de cantar, sabía que esa noche los aplastarían. La soltura y seguridad con la que John había recorrido el escenario lo había aterrorizado, sin contar la voz y la manera de tocar la guitarra.

– ¿Estás listo? – preguntó Tom sacándolo de sus pensamientos

– No – rio el moreno separándose de él – Pero… hay que hacerlo

– ¡Lúcete, amor mío! – le pidió el mayor tomándole el rostro entre ambas manos – Demuéstrales por qué estoy tan enamorado de ti

– No creo que quieras que les demuestre eso – dijo el pelinegro alzando una ceja insinuantemente

– Tienes razón, mejor no – rio el guitarrista – Eso me lo muestras a mí más tarde – dijo besándole suavemente en los labios

– Está bien – sonrió el menor – Vamos ahí fuera y terminemos con esto

– ¡Te amo! – sonrió el mayor

– ¡Y yo a ti! – dijo Bill besándolo fugazmente

Salieron del camerino y se encontraron con los G’s y demás en el pasillo. Desde allí podía escuchar a la mujer hablando de ellos y el público gritando. Les colocaron los audífonos y les entregaron sus respectivos instrumentos.

Siguieron a un chico que les guiaba el camino con una pequeña linterna ya que estaba oscuro y subieron al escenario. Cada uno se colocó en su lugar y Bill no podía dejar de temblar, escuchaba los gritos y veían los flashes y luces de móviles. Respiró profundamente y esperó unos segundos, pronto escuchó como su hermano comenzaba a tocar las primeras notas de la canción.

Los nervios se apoderaron de su cuerpo cuando las luces se encendieron y les dejaron a vista de todos los presentes.

Miró de reojo a sus compañeros y estos estaban tocando emocionados, no había ni un pequeño rastro de nervios en ellos. Volvió su mirada al público y allí le vio, mirándolo con ojos curiosos y desafiantes, esperando que fallara, quizás. Le demostraría que Tokio Hotel seguía vivo y que él podía llevar la banda en sus hombros. John Taylor se enteraría quién era Bill Kaulitz.

Comenzó a cantar, Tom pudo notar que la voz de su gemelo se quebró un poco, pero pronto pudo escuchar cómo se llenaba de seguridad y cantaba con esa pasión que tanto había encantado a todos en la discográfica. Podía sentir la emoción del pelinegro en su pecho y miró las primeras dos filas de público y vio a sus fanáticos alborotados gritando por ellos y fascinados con Bill. Sonrió y miró a sus amigos, quienes también se dieron cuenta, de que Bill lo había logrado.

Los nervios del menor quedaron en el olvido y pronto vieron como recorría el escenario como si fuera suyo, como si llevara haciéndolo por años, interactuando exitosamente con el público, el cual no tardó en comenzar a lanzar muestras de cariño hacia el escenario.

Y terminó, su presentación había terminado provocando un ruido ensordecedor en el lugar. Los chicos se despidieron rápidamente del público y bajaron del escenario, allí la seguridad del pelinegro se desplomó y rompió a llorar en brazos de su hermano por todos los sentimientos encontrados que tenía dentro.

– Bill eso fue… ¡wow! – le felicitó Georg abrazándolo – ¡Eres el puto amo!

– ¿Yo… de verdad estuvo bien? – preguntó entre lágrimas

– ¿Has visto al público? Se ha vuelto loco por ti – sonrió el baterista alborotándole el cabello – Estuviste asombroso

– Mi bebé hermoso – gritó Liz apartando a todos para poder abrazar al menor – Naciste para esto, eres una gran estrella, cariño – sonrió abrazándolo fuertemente – Todos estuvieron geniales, estoy tan orgullosa de ustedes, mis pequeñitos

Los cinco se abrazaron y siguieron felicitándose, a pesar de haber sido solo una canción, lo habían disfrutado, tanto tiempo sin tocar frente a sus fanáticos y sin embargo, allí estaban apoyándoles, eso fue lo mejor para ellos, la noche había sido un éxito total.

– Bien – habló Liz rompiendo el abrazo – Basta de lágrimas y cursilerías, ahora deben volver al hotel para prepararse y ponerse más guapos para la fiesta que les espera, se lo merecen

– ¡Sí! – celebró Georg aplaudiendo – Espero que no hayas olvidado tus instintos ligadores, Thomas

– ¡Oh, cállate, Geo! – rio Tom – Ya veremos quien termina solo en su cama esta noche, te puedo asegurar que yo tendré la mejor compañía – dijo bastante alto para que su gemelo pudiera escucharlo

El pelinegro escuchó y sintió como sus mejillas se ruborizaban bajo la atenta mirada del mayor. Entró al camerino dejando a sus ansiosos compañeros fuera. Se sentó en uno de los sofás y dejó que su mente intentara asimilar todo lo que había sucedido esa noche. En el escenario sintió mucho miedo, pero luego de mirar la manera desafiante y burlona con la que le miraba John y ver al público emocionado, le llenó de confianza y algo se apoderó de su cuerpo, una sensación de seguridad y felicidad.

Le había encantado, se había sentido poderoso y no podía esperar para repetirlo nuevamente.

Continuará…

Pues ahora sí Bill es el amo y señor de Tokio Hotel jajaja

¿Qué creen que piense John de él? ¿Qué sucederá en la fiesta?

¡No se pierdan la continuación!

Les dejo una imagen para que sepan como lucen los chicos de Too Late Marlene y también el link de la canción que he escogido para Too Late Marlene (el vídeo es twincest jejeje)

Canción: Twincest [Lips like morphine]

¡Gracias por leer y comentar!

¡Besos!