Fic TOLL de Michelle483
Capítulo 20: Látigos de diamantes
—Estaré aquí en menos de lo que piensa—guiño el ojo dándole un casto beso, al salir Bill se despidió de Tom y fue a su encuentro con Louis pero el pequeño no noto que tenía a un espía detrás de ellos, el casta tatuado que los veía sonrió al tomar fotos de esos dos donde se abrazaban y se miraban tiernamente y rio al momento de enviárselas a Tom.
El teléfono de Tom sonó cual rayo el ahora de rastas levanto su celular abrió el mensaje de aquel número desconocido abrió las fotos y se encontró con una gran razón para volverse frenético de repente se había dado cuenta que en estos días de su ausencia el había sido cruelmente engañado, Bill se había conseguido otro chico con mucho rencor tiro el celular al sofá, con frustración sujeto su cabeza como si hubieran despertado a su dragón interior fue a preparar varias cosas.
—Este día habrá una tormenta por lo que veo—miro hacia la ventana que mostraba que el sol había desaparecido con las nubes grises que opacaban todo.
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*Con Bill*
—Es un gusto volver a verte es increíble lo que has crecido Bill—dijo el castaño tomando su taza de café.
—Creo que no hay nada nada que alagar Louis estoy muy feliz de verte, oye porque volviste a Alemania.
—Tenía que a Múnich mañana en la mañana voy para allá y de paso te vine a visitar, porque ya no trabajas en el restaurante.
—Ya no soporto más bofetadas—dijo con seriedad mirando al suelo solo de recordarlo traía un severo trauma.
—Es increíble lo que hace ese hombre con todos sus empleados—respondió con las misma seriedad—darles bofetadas por un mínimo error—me parece muy bien que hayas renunciado.
— ¡Lo sé!, ahora estoy mucho mejor
—eso me parece Bien….bueno creo que es hora de despedirnos—se levantó a darle la mano y un abrazo—cielos ya son las diez de la noche, nos la pasamos bien—rio
—Hasta luego—sonrió y salió de ese lugar. al llegar a la casa encontró el lugar sumamente vacío y silencioso era un ambiente muy tenso creyó que su amo no estaba en casa así que subió a su habitación al llegar se quitó su chaqueta y bufanda.
—Llegas tarde—se escuchó una voz detrás de él.
— ¡Oh Tom! —sonrió, e intento abrazarlo pero este se negó—lo se perdona se me fue la noción del tiempo—sintió algo de mido al ver la cara de Tom no estaba nada feliz.
—Si….con otro verdad
— ¿Otro?
— ¡No te hagas el mareado!…el chico castaño…tu…abrazándole….mirándose tiernamente… ¿crees que soy tonto? —Pregunto dolido—me lo tratas de ocultar.
—Oh es Louis pero papi tú te estas confundiendo…el—trato de calmarlo…muy tarde
— ¿El qué?…te vas a en la tarde y regresas muy noche ¡pero que pasa contigo!
—Pero…
— ¡Nada de peros!, me voy unos días y tú te acuestas con otros ¡en mi ausencia!, te baño, te doy donde vivir, te follo, te doy de comer y tú me lo pagas así… ¡maldita puta desagradecida! —le dio una cachetada sumamente fuerte que Bill aun no sabía que si las palabras que le estaba gritando le dolían más o la bofetada que le hacía recordar malos recuerdos.
—Tom….—sollozo débilmente sujetando su mejilla—yo no me he acostado con nadie más….yo…t-te lo juro—Tom ni siquiera le respondió, solo lo sujeto fuertemente del brazo y le obligo que lo viera a los ojos, Bill comenzaba a llorar no sabía que estaba pasando todo era tan rápido.
—Quítate la ropa—ordeno
— ¿Q-que? —musito
— ¡Que te la metieron por la oreja y te quedaste sordo!, ¡te dije que te quites los trapos que andas puesto! —lo tiro al suelo sin cuidado alguno, Bill bajo la mirada y continuo llorando y empezó a quitarse su camisa con algo de miedo, las lágrimas que rodaban por sus mejillas dolían y más por la marca de mano que reflejaba una de sus mejillas, al omento que se quitó lo pantalones, Tom estallo de la rabia, Bill traía medias en formas de calcetines y solo él y Bill sabían lo que significaba— ¡oh! Y me dice que no te acotaste con nadie ¡traes medias! —lo levanto.
—Pero eran para ti…—susurro, Tom lo tiro nuevamente al suelo y se dio la vuelta
— ¿Así?…pues yo te tengo algo muy familiar para ti—se dio la vuelta con un collar de cuero—aquí tienes—le coloco el collar fuertemente jalando de la cadena—jatea hasta la cama—ordeno con seriedad. Bill en realidad no sabía que estaba pasando ¿estos son sus ataques de celos?. Bill empezó a gatear sin problemas hasta que la cadena que lo jalaba lo hizo retroceder—sigue…
Bill lo intento mirar y trato de gatear más rápido pero nuevamente la cadena lo jalo hacia atrás y así consta mente casi era imposible Tom siempre lo jalaba hacia atrás, El pelinegro ya estaba cansado y sus piernas y manos ya no daban más en una de las jaladas hacia atrás las medias se rompieron al igual que las rodillas de Bill que comenzaban a sangrar dejando un poco de la sangre regada en el suelo, Bill lo intento nuevamente rogando que su amo no lo jalara de la cadena cuando llego a la punta del edredón agradeció al cielo y por fin se recostó en la cama boca abajo y empezó a llorar en silencio.
—Deja de llorar—dijo Tom al momento de acercase y pegarle en el brazo, ¿Por qué no le daba un beso en la frente? como antes, para que todo el dolor se fuera ¿ tan malo era lo que había hecho?.
— ¿Esa drogado? —pregunto con inocencia, no podía ver sus ojos bien estaba demasiado oscuro para notar si lo estaba.
— ¡Claro que no! —saco su cinturón y bajo su bóxer para darle un azote.
— ¡Ay! —Tom continuo dándole varios azotes haciéndolo gritar de dolor al pobre pelinegro—me duele ¡ay, ay!.
—Maldita….mañana llama a ese hombre si quieres—dijo escupiendo todo el veneno que sentía
—Tu no entiendes….Louis…—le otro azote tal vez el mas fuerte—¡ahhh!…Louis es mi primo…por favor ya detente…..¡es mi primo!
— ¿Tu primo? —pregunto soltando su cinturón ¿Qué diablos acababa de hacer?
— ¡Si!..ahh…el me vino a visitar de Inglaterra…se lo juro yo no me eh acostado con el….se lo juro…se lo juro…ya no me golpee —suplico al verle, Tom bajo la mirada y rasco su cabeza con el jodido pensamiento de que se quería matar los celos lo habían consumido, el de rastas no respondió y salió de la habitación dando un fuerte portazo, había dejado a su Bill más que adolorido Física y psicológicamente.
Continúa…
Gracias por la visita.