«Once in a Lifetime» Fic de lyra
Capítulo 32
Pasaron el resto de la tarde hablando, aunque Thomas no quería atosigarle con más información Bill quería saber todo lo que había pasado, qué había estado haciendo Thomas en su época durante esos meses y dónde había estado viviendo.
—Como ya te dije, mi madre no sabía exactamente el momento exacto de mi llegada a tu época—explicaba Thomas mientras le estrechaba en sus brazos—Falló por unos meses y aparecí en el jardín de esta misma casa una noche. Tu madre regresaba de trabajar y al principio se asustó al ver un desconocido en la puerta de su casa, pero llevaba mi kilt puesto y en cuanto lo vio supo quien era y me llamó por mi nombre completo.
—Y no me dijo nada—dijo Bill haciendo un puchero.
—No podía para no cambiar la historia—le recordó Thomas, sonriendo ante su gesto—Yo quería verte pero me explicó que aún faltaban meses para tu viaje y no podía ser. Me buscó un alojamiento y estuvo todo eses tiempo cuidando de mi. Lo primero fue hacerme un reconocimiento médico, estaba más sano de lo que se esperaba. Y luego me fue explicando todos los adelantos de tu época, aunque tú ya habías hecho esa parte del trabajo pero una cosa era saber que se inventaría una máquina llamada coche y otra verla en persona. Admito que al principio me asusté mucho, pero con el tiempo quise saber más y hasta me atreví a dar paseos yo solos admirando tu época.
Dejaron de hablar cuando la puerta de la casa se abrió y entró Gordon. Thomas se puso en pie y nada más verlo Gordon pegó un bote.
—Thomas, Bill puede verte—susurró yendo a por él.
Pero una vez entró en el salón y vio quien estaba a su lado, no supo como actuar.
—Veo que sabes toda la historia—dijo Bill poniéndose en pie.
Gordon asintió con la cabeza, aliviado de que al fin podía dejarse de secretos y mentiras.
—Voy a echarle una mano a tu madre con la cena—murmuró Gordon.
Bill y Thomas le siguieron y prepararon la cena entre los cuatro. Bill no podía dejar de asombrarse al ver como Thomas manejaba el horno como si llevara toda la vida usándolo. Su madre había hecho un buen trabajo al enseñarle como actuar en su época sin asustarse cada vez que abriera un grifo de agua y esta saliera como por arte de magia.
Cenaron charlando animadamente, Gordon hablaba de su trabajo encantado de tener en Thomas un buen oyente. Y mientras Bill les observaba con una amplia sonrisa en la cara. Estaba muy feliz de tener a su esposo al lado, aunque una sombra de tristeza no le dejaba porque sabía que para estar con él había tenido que renunciar a toda su familia y al clan.
¿Cómo habían sobrevivido sin él? No podía resistir más tiempo sin leer el segundo diario de Claire, y las cartas. Seguro que había alguna de las gemelas, se había llevado tan bien con ellas que echaba mucho de menos sus juegos y preguntas directas.
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Llegada la noche Thomas se despidió con idea de volver al lugar donde había estado viviendo todos esos meses, pero Bill se negó a separarse de él de nuevo.
—Quiero ir contigo—dijo con firmeza.
Necesitaba un tiempo a solas con Thomas, recuperar la pasión porque sentía que ambos estaban nerviosos y que aunque habían pasado solo un par de meses sin verse parecían dos completos extraños.
—Bill, hoy te has llevado una gran impresión—negó Thomas con la cabeza—Necesitas descansar en tu estado.
—He pasado dos meses horribles pensando que no iba a volver a verte y no pienso separarme de tu lado—insistió Bill—Además, tenemos que hablar aún de muchas cosas.
Thomas sabía que era imposible hacerle cambiar de idea y en el fondo lo entendía, pues él mismo sentía un dolor en su pecho pensando que se iba a volver a separar de él aunque solo fueran unas horas.
Simone cedió con la condición de que Bill fuera a su consulta al día siguiente, quería asegurarse de que las sorpresas de ese día no habían afectado para nada a su nieto.
—Y así Thomas puede verle en una ecografía—dijo Simone sonriendo a su yerno.
Bill accedió encantado, sería la primera vez que Thomas vería a su hijo y estaba seguro que lloraría de emoción como él había hecho.
Subió a su habitación y se preparó una pequeña bolsa con lo más imprescindible para pasar esa noche fuera de casa, acordándose de meter las vitaminas que se tenía que tomar todos los días.
Unas vez preparado se despidió de su madre y cogido de la mano de Thomas salieron de la casa.
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No tuvieron que andar mucho, Simone le había buscado una habitación a Thomas en una residencia de estudiantes que había cerca de donde vivían.
Bill conocía a la dueña, era una vieja amiga de su madre y le hizo el favor de alojar a Thomas aunque no fuera estudiante. Y también hizo la vista gorda cuando le vio aparecer de la mano de Bill, sabiendo que una de las normas de la residencia era no mantener relaciones bajo su techo. No era un motel de carretera donde satisfacer los impulsos sexuales.
La habitación de Thomas era minúscula comparada con la que había tenido en Leoch o Lallybroch, solo contaba de una cama amplia eso sí, un armario y un escritorio. También había un baño pequeño también, Bill no sabía como Thomas no se había subido por las paredes al estar ahí metido durante tantos meses.
Thomas le cogió la bolsa y la dejó sobre el escritorio, viendo como Bill paseaba por la habitación y tomaba asiento a los pies de la cama. Thomas se sentó a su lado y echando un brazo por sus hombros le hizo recostarse.
—No sabes la de noches que soñaba con este momento—susurró abrazándole con fuerza—Volver a tenerte en mis brazos y sentir al pequeño Jamie en tu vientre.
—Yo también soñaba contigo—confesó Bill con los ojos cerrados—Que vivíamos en Lallybroch y criábamos allí a nuestro hijo.
Thomas sonrió al escucharle, ahora que se habían juntado de nuevo sería bonito volver a Escocia y vivir allí para siempre.
—*Estuve enfadado contigo durante mucho tiempo—dijo Bill de repente—Me obligaste a volver y vivir una vida que ya no quería vivir…pero tenías razón*. Nuestro hijo está a salvo, crece fuerte sano…y cuando le siento moverse…me deja sin aliento…
Dejó de hablar al sentir los labios de Thomas sobre los suyos, estaban ambos deseando estar a solas para poder besarse en condiciones.
Separó los labios y dejó que entrara en su boca, que la recorriera con su lengua mientras que él jadeaba y gemía pensando que era imposible volver a tenerle a su lado.
Se separaron cuando sintieron que les faltaba el aire, sonriendo Bill al recordar el primer beso que se dieron en su noche de bodas y como soltó sin poder contenerse que Thomas besaba muy bien y que dónde había aprendido.
— ¿Sabes que mientras preparabas tu equipaje tu madre me dio una pequeña charla?—preguntó Thomas sonriendo al tiempo que acariciaba el vientre de Bill.
Bill negó con la cabeza, estremeciéndose bajo su contacto. Se subió la amplia camiseta que llevaba y dejó que Thomas siguiera con sus caricias.
— ¿Y qué te ha dicho mi madre?—preguntó Bill con mucha curiosidad.
—Creo que aún está enfadada conmigo por no explicarle que vendrías embarazado a tu época—empezó a decir Thomas sonriendo—La verdad es que no dije nada porque en esos momentos estaba afectado por lo ocurrido y luego más tarde pensé que sería mejor que se lo dijeras tú en persona.
—Me pasó como a ti, tardé unos días en decírselo porque hablar del embarazo era hablar de ti y sentía que no me salían las palabras—dijo Bill suspirando.
—Lo sé, sasenach—susurró Thomas besándolo en la frente—Sé que se le pasará el enfado a tu madre. Eres su único hijo y solo quiere lo mejor para ti. Por eso me advirtió de algunas cosas.
Bill alzó una ceja al escucharle, nunca antes su madre se había portado como una leona defendiendo a su cachorro porque no había motivos para ello. Pero con Thomas… ¿qué era lo que había pasado?
—Me ha dicho que tú ya eres mayor de edad y que no puede prohibirte nada—empezó a decir Thomas—Que estamos casados y aunque no ha sido una boda del todo legal ella lo va a respetar porque sabe que nos amamos y solo quiere verte feliz. También me ha dicho que sabe que esta noche no vamos a dormir mucho precisamente, que lo entiende y que después de todo lo que hemos vivido pedirme que te respete iba a ser demasiado tras tanto tiempo separados.
Bill le escuchaba sonriendo, su madre les daba permiso para pasar la noche juntos y si sucedía algo más que era inevitable, les daba su bendición.
—Yo alucino con mi madre—murmuró entre risas.
—También me ha dado esto, me ha dicho que tú me explicarías para que sirven—dijo Thomas sacando unos envoltorios del bolsillo trasero de sus pantalones—También me ha dicho que ahora mismo no los iba a necesitar pero es bueno que sepa su funcionamiento para el futuro.
Bill se echó a reír al ver los condones que su madre se había atrevido a regalar a su yerno, pensando de dónde los había sacado y cuanto tiempo llevaría esperando para poder dárselos.
—No me he atrevido a explicarle que ya lo sé porque tú me lo contaste hace…muchos años—dijo Thomas entre risas.
Bill se echó a reír, recordando una lejana noche en la que estando en la cama sacó el tema de la protección en las relaciones sexuales, explicándole como en su época tenían unos artilugios que servía para impedir el contagio de enfermedades de transmisión sexual.
Se calló que también servían para impedir los embarazos no deseados, en esos momentos no sabía si lo estaba o no y no quería sacar el tema por si Thomas lo relacionaba y sacaba sus conclusiones, o decidían dejar de hacer el amor por una buena temporada para evitar un embarazo siendo él tan joven aún y no estando claro si se iba a quedar en esa época o regresar a la suya.
Thomas dejó los condones sobre la cama y poniéndose en pie se desnudó ante la mirada de Bill, que pensaba que tras tantos meses de castidad su cuerpo reaccionaba con solo ver el de Thomas en todo su esplendor.
Se acomodó en la cama, viendo como Thomas quedaba expuesto ante sus ojos despojándose de la ropa moderna que llevaba. Parecía no echar de menos vestir un kilt, le había visto muy cómodo llevando unos jeans azules rotos en las rodillas , camiseta negra de manga corta y cazadora de cuero también oscura.
Sabía que la ropa había sido escogida por su madre, vistiéndole a la última moda para que no llamara la atención, sin nada que delatara que era un bravo guerrero escocés que había viajado 300 años en el tiempo.
Se levantó y le hizo retroceder un paso. Hacía meses que no le veía en sin nada de ropa encima y quería comprobar que era tal y como lo recordaba.
Puso una mano en su desnudo pecho y empezó a caminar a su alrededor recorriendo su desnudez con sus temblorosos dedos, bajando por su brazo hasta llegar a su cadera para luego seguir por sus nalgas y subir por su musculosa espalda sin poder dejar de admirarla.
Lo rodeó y se colocó ante él sonriendo. Entonces sus ojos divisaron algo que había pasado desapercibido por el largo pelo de Thomas que se había soltado mientras se desnudaba. Echó a un lado un mechón y entonces descubrió un tatuaje en su pecho. Pero no uno cualquiera, era el emblema de los McKaulitz sobre el corazón de Thomas.
—Je suis prest—leyó Bill en voz baja al tiempo que pasaba la yema de sus dedos por la frase.
—No sabía lo que era un tatuaje y cuando tu madre me lo explicó vi una manera de honrar a mi clan—susurró Thomas poniéndose tenso a su contacto.
Llevaban meses sin tocarse y un solo roce de Bill había avivado la llama.
—*Y ahora…es tu turno—susurró Thomas tragando con esfuerzo—Quítate la ropa*.
Bill asintió con la cabeza y retrocediendo un paso se desnudó ante su esposo, viendo como le hacía un repaso de arriba abajo mientras se pasaba la lengua por los labios.
No pudo impedir sentir algo de vergüenza y sintiendo que se sonrojaba desvió la mirada del cuerpo desnudo de Thomas cubriendo su propia desnudez con sus manos.
Thomas le estaba haciendo un lento repaso de arriba abajo, comprobando que seguía igual de atractivo como lo recordaba.
—Vamos…no te quedes callado, di algo—pidió Bill nervioso por su mirada.
—Eres más hermoso de lo que recordaba—susurró Thomas sin poder apartar de él la mirada.
Bill suspiró al escucharle, nadie en su época soltaba los piropos como lo hacía Thomas, de una manera tan poética…
Sintió como su cuerpo se relajaba y bajó las manos para que siguiera estudiándolo, sabiendo que su abultado vientre sería lo que más llamaría su atención.
No se pudo reprimir más y minutos después Thomas le estrechaba entre sus brazos mientras le besaba con mucha pasión. Le hizo tumbarse en la cama y sin dejar de besarle empezó a acariciar cada milímetro de su desnuda piel.
Hasta llegar a su vientre, que acarició con suavidad mientras que daba el beso por finalizado.
— *¿Podemos?—preguntó entre jadeos— ¿No le pasará nada al bebé?*
Bill negó con la cabeza sonriendo al tiempo que separaba las piernas y rodeaba su cintura con ellas.
—*Hazlo ya—susurró Bill desesperado—Y sin suavidad…*
Nada más terminar de decirlo Thomas le embistió con fiereza y entró en su cuerpo arrancándole un gemido. No podía reprimirse, llevaba meses esperando ese reencuentro y una vez estando los dos desnudos deseándolo con fuerza sentía que iba a morir si no probaba su cuerpo de nuevo.
Empezó a embestirle con rapidez, sentía que para ser de nuevo su primera vez iban a volver a terminar demasiado pronto pero las ganas le podían, y los gemidos de Bill le animaban a acelerar el ritmo, hasta que no pudo reprimirse más y se derramó mordiéndose el labio para no gritar, sintiendo como los ojos se le llenaban de lágrimas porque estaba de nuevo junto a su esposo amado…
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Minutos después, recuperaban el aliento sin dejar de sonreír ampliamente. Tumbado de espaldas, Bill dejaba que Thomas acariciaba cada milímetro de su cuerpo como si quisiera comprobar que aparte de su abultado vientre seguía siendo el mismo Bill que conoció 300 años antes.
—Tienes una piel tan suave….—susurró Thomas acercándose a sus labios—*Dios…tocarte sassenach…no puedo mirarte y tener las manos quietas, o tenerte cerca y no desearte*
Besó sus labios con suavidad, sintiendo como Bill se abrazaba a su cuello y respondía al beso.
— *¿Así te sentías…la primera vez que hicimos el amor?*—preguntó Bill contra sus labios.
—*Para mi siempre fue completo, sasennach*—respondió Thomas.
Bill suspiró y se acomodó mejor en la cama, recostándose sobre el pecho de Thomas.
—*Es como montar en bici*—murmuró cerrando los ojos.
— *¿Qué es una bici?*—preguntó Thomas.
—*Me refiero a que siempre recordamos bien como se hacía*—explicó Bill sonriendo.
— *¿Creías que podríamos olvidarlo, sassenach?*—preguntó Thomas devolviéndole la sonrisa—*Puede que me falte práctica, pero no he perdido mis facultades*
Bajó la cara y buscó de nuevo sus labios, no podía dejar de besarle.
—*No puedo explicarte…lo que siento al tocarte—susurró Thomas —*Comprobar que eres tú. Encontrarte otra vez,… perderte fue lo peor que me podía haber pasado…*
—*No me vas a perder nunca más*—dijo Bill con firmeza—*Jamás volveré a dejarte*
—Tenías que irte, lo hiciste por el pequeño Jamie. Vas a ser un padre maravilloso, lo sé—dijo Thomas con firmeza.
—Y tú también—susurró Bill—Entre los dos criaremos a nuestro hijo y cuando tenga uso de razón le hablaremos de sus antepasados. Quiero que sepa que pertenece a un clan de bravos guerreros escoceses, y quiero hacer un viaje a Escocia para que conozca sus raíces.
—Lo haremos sassenach—prometió Thomas estrechándole en sus brazos—Más adelante haremos planes, pero ahora…solo quiero estar contigo en esta cama y no dejarla nunca.
Bill sonrió al escucharle, eso era justo lo que él también quería.
Se acomodó en sus brazos y buscando refugio en su pecho cerró los ojos y se fue quedando lentamente dormido con una amplia sonrisa en los labios…sintiendo que era la primera vez que sonreía desde hacía muchos años…
Continuará…
os dejo este video, son algunas escenitas de la serie donde sale la que describo de como Bill rodea a Thomas sin dejar de acariciar su desnudez, me parecio preciosa y quise ponerla.
La pareja de esposos por fin están juntos otra vez!!! 😁😂😂😂
Ay, ay vi el video y caramba.. le puse la cara de Tom y el cuerpo de Bill y Uffffff que cosa más bella y erótica. .y con la fuerza de laa embestidas en el video y lo descrito en el fic. Ay mi corazón, se alegra de que estén juntos y yq no se separen más. Hermosas las palabras que se dedicaron ambos♥
Me encanto este capitulo, tuvieron su tan ansiado reencuentro y ya comienzan hacer planes para el futuro, ahora que ya nada podra separarlos.
Nos leemos en el proximo, que pases una feliz navidad 🎅🎄