Fic TOLL de Michelle483
Capítulo 18
—¡Que! —dijo abriendo los ojos como plato—pero….porque….
—Por Ti…..—le sonrió, el trenzado tomo a Bill por la cintura y lo atrajo a el—a puesto que Gustav no te hubiera dado tanto placer.
—¿Gustav?, oh ¿Estas celoso de el? —rio.
—Pues alguien, lo estaba abrazando esta mañana
—¡Bah!, tan celosito de el…..tu sabes que te amo ti ¿no?
—Si….si—bufo
—Y como ya estas soltero y yo también…pues…¿Quieres volver conmigo?
—¡Es enserio! —el chico asintió—Creo que tardaste en pedírmelo.
—Perdón…es mejor que nos vayamos no vaya hacer que mi hermana piense que hui de la casa.
—Tranquilo Blanca nieves, ella sabe que estas Bien.
.
(Tom)
—Nos fuimos del hotel y llegamos a la mansión, Bill me espero afuera y agradecí a Ginger por todo, mande a Megan a dormir y me despedí de los hermanos, y era hora que también me acostara ir a dormir sin quitar la boba sonrisa que tenia nunca creí que podría deshacerme de maría y nunca creí volver con Bill solo esperaba y deseaba que no fuera un sueño y al despertar volver a mi pesadilla de días.
—Bien otro día—dije al momento de salir del baño ya cambiado y listo para empezar otro día.
—¡Tom! —grito un pelinegro que entraba a mi recamara y tirarme en la cama para quedar encima de mi.
—¡Hey!, ¿Qué haces aquí?
—Te vine a ver…día libre no tenia que hacer—dijo algo molesto
—¿Por qué esa cara de molestia?, ¿Quién no ama los días libres?
—Pues si lo se pero….amo estar con los niños en la guardería Tom…—me beso, hicimos que el beso fuera mas largo, hasta que Bill se separo de mi algo…..sediento de mas—Tom…quiero…—metió un dedo en su boca que empezó a succionar.
—¿Qué esperas? —le dije con tono malicioso sabia los que quería con ese gesto, Bill paso su mano por mi pantalón y paramos hasta que escuchamos una grito muy conocido.
—¡Papa! —grito Megan quien entro corriendo hacia mi—¿Qué hacen? —dijo viendo la extraña pose que teníamos Bill y yo.
—emmm….nosotros…—trate de explicar
—Nosotros estábamos hablando—dijo Bill al momento de levantar a mi hija en sus brazos y ponerla en medio de nosotros, me acomode en la cama y abrace a ambos y bese a Bill.
—¿Volvieron? —dijo algo sorprendida la castaña
—Am…si—le dije besando su mejilla
—¿Pero y María?, hablando de ella ¿Dónde esta?, siempre se levanta a esta hora para ir al salón.
—Megan María ya no esta en la casa…..
—¡Que!, ¡de verdad! —dijo sacudiéndome, Bill reía y la abrazaba—¡Ya no esta la bruja! —grito de emoción—Bill , ya se fue tu enemiga—dijo ahora sacudiendo a Bill por la cintura.
—¿Mi enemiga? —pregunto sin comprender lo que la niña quería decir con eso
—¡La reina!, ¡La reina malvada!,¡Bill tu enemiga publica! —decía
—No es mi enemiga, y dejen de estar diciendo que somos personajes de cuentos de hadas—dijo levantándose algo serio—, no soy blanca nieves, María es ninguna reina o bruja y Tom no es ningún príncipe—dijo ya cansado si tal vez todos habíamos estado diciéndonos así…pero tal vez nos llamamos así por alguna razón, me levante del sillón cargando a Megan y bese a Bill en la mejilla.
—Pero no te enojes guapo, se nos pegan tus cuentos lo deberías saber—le dije tratando de calmar su ira—salgamos mejor—exclame todos subimos al auto y pasamos el día juntos ahora casi todo me quedaba mas que claro cuando veía a Bill abrazando a Megan y a Megan con una gran sonrisa que nadie se la quitaba, nunca me va a caber en la cabeza como ella no lo aceptaba, pero ella me dio sus razones aquel día pero espero que con esta salida de todos juntos la haya hecho cambiar.
—¿Pasa algo Tom? —Argumento el pelinegro quien me sacaba de mis pensamientos
—¿Ah?, si, si este puedes quedarte aquí un momento voy a buscar algo ya vuelvo—dije apartándome de su lado, me aleje muy lejos de donde estaban ellos tal vez aria una movida no planeada y apresurada entre a una joyería y empecé a buscar un anillo de compromiso, entre buscar y buscar mas encontré un anillo de oro sencillo pero un diamante sobre salía de lo demás espero que sea el correcto, le pedí al señor que lo sacara y ese me lo llevaba con caja y todo solo pensaba en la arma de oro que tenia ahora en la mano.
Continúa…
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